martes, 12 de mayo de 2020

UNA DECLARACIÓN VERGONZOSA, A LA QUE LO CRIMINAL NO LE QUITA LO RIDÍCULO - ¿AFRONTAR EL COVID-19 IMPONIENDO EL ABORTO?

Hacer frente a la “pandemia” 
generando más muertes




En su sed de sangre, los grupos de poder mundial que operan tras la fachada de la ONU (y sus derivados: OMS, UNFPA, ONU MUJERES, UNICEF, FMI, etc) no vacilan en presentar al aborto como la gran solución para los problemas de la humanidad o, como mínimo, como una necesidad elemental ante toda crisis. Tras leer la lamentable declaración(1) firmada el pasado 6 de mayo, sólo nos resta esperar una próxima declaración en la que el aborto sea presentado también como solución para el dolor de muelas, la gripe y las migrañas. No importa cuánto tengan que retorcer sus argumentos, estos patéticos personajes se las amañan siempre para que cualquier situación (ya sea de pandemia o de lluvia de meteoritos) sea indicadora de que debe aplicarse la receta mágica que han estado prescribiéndonos desde hace décadas. Sí, adivinó Ud. La receta es: ABORTO.
Ahora resulta que el COVID-19 nos deja ante la imperiosa necesidad de “asegurar el acceso al aborto”, según ellos, quienes parecen estar seguros de que el mundo encontrará cura para todos sus males si se da un baño en sangre fresca e inocente. Como quienes afirman que es muy sano sumergirse en leche o aceites esenciales. Una cosa es clara: su desenfrenada manía de exterminio a como dé lugar. Ya vimos al Ministro Zamora (de México) lanzar, en el marco de la crisis por COVID-19, una directiva sanitaria mediante la cual se permite el aborto cuando la madre tiene coronavirus.
Recapitulando. Los representantes de 59 países del mundo (la Argentina entre ellos) firmaron una infame declaración emitida el 6 de mayo para promover, entre otros métodos de reducción de población, el aborto durante la “pandemia”. Eso sí, para no perder el estilo, el documento se encuentra cuidadosamente adornado con eufemismos y ambigüedades, giros retóricos y melodramáticos términos.
¿Quién firmó por parte de la Argentina? Felipe Carlos Solá, Ministro de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto.

La declaración rubricada por nuestro país establece que la financiación de la “salud” sexual y reproductiva (esterilización, aborto, etc.) debe “seguir siendo una prioridad”. Como remate, los países firmantes dejan expreso que agradecen los “esfuerzos multilaterales” de la ONU en cuanto a su respuesta al COVID-19 (parte de esa “respuesta” es un manual que califica al aborto como un derecho humano, incorporado por iniciativa del Secretario General de la ONU). También el “Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer” (CEDAW) que no es otra cosa que un tentáculo de la misma ONU, lanzó ahora su propia orientación sobre COVID-19, donde exige a los países proporcionar servicios de aborto y post-aborto durante la pandemia (parte de la “respuesta” de la Organización de Naciones Unidas a la crisis).

El instrumento internacional que da motivo a estas líneas es realmente asfixiante para el alma (la expresión sea permitida). Y la situación también lo es. Porque estamos cercados. Sitiados. No por un virus (o no únicamente) sino por las sombras del comunismo, de la masonería y del satanismo más real. ¿Exageración? ¡Que cada uno dé una mirada y haga cálculos! Aquí y ahora, con nuestras instituciones corrompidas, sin líderes cabales que se planten ante el mundo para defender a la Patria, con nuestros hijos a medio colmillo de ser devorados por los lobos hambrientos de la ESI, con las Misas prohibidas, con los hospitales abiertos para exterminar a criaturas pre natales, con los medios de comunicación impregnados de blasfemias, con nuestras voluntades desgastadas, desangradas, casi parece imposible pensar que morirse es nuestro horizonte más negro. No. Nuestro horizonte más negro es la esclavitud y la vejación, ser testigos de la decadencia total de la Argentina (que ya viene en caída libre desde hace mucho), ver a nuestros hijos contaminados por las ideologías consumirse en todo tipo de perversiones, contemplar cómo nuestros templos  se convierten en baldíos, y saber que nosotros, con nuestro silencio, con nuestra ignorancia o con nuestro desimportismo, hemos contribuido a esa ruina, saber que hemos depuesto toda arma y entregado nuestra Patria al enemigo.

“Y después de la muerte, el juicio” (Libro de Job).

                                             -   Julieta G. Lardies



NOTA: vaya un humilde reconocimiento a quienes no se rinden, a quienes continúan batallando rosario en mano, y lo harán hasta el final. No los dejemos solos en el frente de batalla.



(1) DOCUMENTO completo firmado el 6 de mayo: https://www.diplomatie.gouv.fr/es/venir-a-francia/entrar-a-francia/covid-19-informaciones-para-ciudadanos-extranjeros-en-francia/article/declaracion-conjunta-proteger-la-salud-y-los-derechos-sexuales-y-reproductivos

Fuente periodística base: https://www.aciprensa.com/noticias/59-paises-firman-declaracion-conjunta-para-promover-aborto-en-medio-de-la-pandemia-81935